Los 10 misterios sin resolver más grandes sobre el planeta tierra

Desde el agua que cubre la mayor parte hasta la luna que la orbita, aquí hay algunas cosas extrañas acerca de nuestro planeta natal que la ciencia todavía no entiende completamente.


¿De dónde vino toda el agua?




Agua, agua por todas partes. Cubre el 70 por ciento de la superficie de la Tierra y le otorga el apodo de "planeta azul". Y, sin embargo, ¿de dónde vino? ¿Cómo es tan abundante en nuestro planeta cuando casi no existe en el resto de nuestro sistema solar? La mayoría de los científicos creen que cuando se formó el planeta Tierra, hace unos cuatro mil quinientos millones de años, era un planeta seco y rocoso. El más popular teoría científica afirma que el H 2 O llegó en forma de varios asteroides enormes llenos de hielo. Otro sugiere que el agua realmente ha existido desde la formación de la Tierra, y que la Tierra en formación la retuvo de la nube de gas y polvo que formó el sistema solar. Sin embargo, sin embargo, sucedió que ciertamente funcionó bien para las formas de vida de la Tierra.

¿Qué pasa con todo el oxígeno?



Otra cosa que ha demostrado ser muy ventajosa para las criaturas que viven en la Tierra es el oxígeno del planeta. Y aunque realmente sabemos cómo se originó, hace unos 2.400 millones de años, las criaturas microscópicas llamadas cianobacterias liberaron oxígeno como producto de desecho, llenando la atmósfera con él. Los sucesos de los próximos eones son un poco menos claros. Después de eso, el nivel de oxígeno en la atmósfera terrestre subió y bajó hasta que finalmente se estabilizó hace unos 540 millones de años. Desde entonces, ha permanecido en el nivel transpirable que experimentamos hoy. ¿Pero qué causó que se estabilice de repente? Este sigue siendo uno de los mayores misterios científicos sobre nuestro planeta natal.

¿Qué causó la explosión cámbrica?



No, la explosión cámbrica no era un kaboom parecido al Big Bang. En cambio, se refiere a la explosión de vida compleja que ocurrió en la Tierra hace unos 540 millones de años. Durante la mayor parte de la historia de la Tierra antes de esa fecha, la vida consistía principalmente en bacterias, eucariotas y plantas ultra simples. Pero a principios del período cámbrico, la evolución parecía experimentar un crecimiento acelerado, y las criaturas complejas comenzaron a evolucionar a una velocidad nunca antes vista. De repente, las formas de vida tenían cerebros, ojos y esqueletos. La mayoría de las criaturas vivas hoy en día pueden remontar su linaje al período cámbrico. Algunos científicos creen que la explosión cámbrica se produjo como resultado del oxígeno mencionado anteriormente, que se estabilizó casi al mismo tiempo. Pero ya que en realidad no están seguros de por qué eso ocurrió, tampoco, esto no se aclara mucho. Otros creen que factores como el aumento de la temperatura de la Tierra y el desarrollo de ambientes acuáticos poco profundos también contribuyeron.

¿Podremos alguna vez predecir terremotos?



A pesar de nuestro intenso estudio de la Tierra y la forma en que funciona, todavía no hemos podido encontrar una manera de predecir con precisión los terremotos. Ciertamente podemos intentarlo, pero nuestra tecnología actual puede predecirlos con tanta precisión como un pronóstico del tiempo, y todos sabemos cómo va . Sabemos que los terremotos comienzan cuando las rocas se agrietan bajo tierra y envían ondas sísmicas hacia la superficie, pero no hemos descubierto por qué  de que  ocurra, o cómo predecirlo.

¿Cuando comenzaron las placas tectónicas?



Parte de la razón por la que es tan difícil predecir los terremotos es el hecho de que no sabemos mucho sobre el proceso que los causa: la tectónica de placas. La corteza terrestre está compuesta por varias placas tectónicas cambiantes. Sin embargo, los científicos solo pueden especular sobre cuándo y cómo comenzó el proceso. Parte de la razón por la cual es tan difícil desenterrar los misterios detrás de estas placas es porque prácticamente no hay evidencia geológica que quede de hace mucho tiempo. Los científicos pueden aproximarse a que la actividad tectónica comenzó hace unos tres mil millones de años, pero la forma en que comenzó es algo que nadie puede imaginar.

¿Qué hay dentro del núcleo de la Tierra?



Si bien puede parecer que los humanos han explorado con éxito los confines más lejanos de nuestro planeta, en verdad solo hemos arañado la superficie. (¡Juego de palabras!) Hay mucho más en la Tierra que su superficie; la mayor parte del planeta esférico permanece virtualmente inexplorado. La razón de esto, por supuesto, es que las condiciones debajo de la superficie de la Tierra son completamente inhóspitas. Sabemos que la capa debajo de la corteza, el manto, está compuesta principalmente de roca sólida de silicato. Pero el mismo corazón de nuestro planeta sigue siendo un misterio. Durante muchos años, los científicos creyeron que el hierro y el níquel formaban la capa más interna de la Tierra. En la década de 1950, sin embargo, descubrieron que esos elementos no eran lo suficientemente ligeros como para explicar la densidad medida del núcleo por sí mismos.

¿Qué pasó realmente con los dinosaurios?



Esos pobres dinos. Durante millones de años, fueron los gobernantes indiscutibles del mundo prehistórico; desgraciadamente, hoy no son más que la fuente de fascinación de los museos y el espectáculo cinematográfico. ¿Qué causó exactamente que estas criaturas masivas encontraran su final evolutivo hace 65 millones de años? Hay un par de teorías generalizadas: una sugiere que un asteroide gigante golpeó la Tierra. El otro sugiere que fue una serie catastrófica de erupciones volcánicas. En cualquier caso, sin embargo, el resultado hubiera sido bastante similar: el polvo y los escombros hubieran bloqueado el sol, dañando procesos que dan vida como la fotosíntesis. La temperatura de la Tierra también habría aumentado peligrosamente debido a todos los gases de efecto invernadero en la atmósfera. Tanto la hipótesis del asteroide como la actividad volcánica están respaldadas por descubrimientos científicos significativos.

¿Cómo se formó la luna?



Los científicos no están seguros de cómo la Tierra desarrolló su compañero en órbita. Muchos creen que la luna se originó debido a una colisión entre la Tierra en formación y un protoplaneta un poco más pequeño. Las muestras de las misiones de Apolo, sin embargo, han demostrado que la composición química de la luna es muy similar a la de la Tierra. Esto sugiere que la luna puede no haber sido un cuerpo separado, sino que en realidad se formó a partir de una porción del planeta Tierra. Una tercera teoría, que sugiere que la luna era un cuerpo separado que fue arrastrado a la órbita de la Tierra, brinda la mejor explicación de por qué solo un lado de la luna nos enfrenta.

¿Cómo obtuvo la Tierra su nombre?



Este es un dato divertido: la Tierra es el único planeta en nuestro sistema solar cuyo nombre no proviene de un dios romano o griego (sí, incluido Plutón). El nombre "Tierra" viene del inglés antiguo y las palabras alemanas para "tierra", pero nadie sabe con seguridad cuándo fue acuñado, o por quién. La teoría principal de por qué el nombre de la Tierra no proviene también de la mitología es que las personas antiguas no estaban conscientes de que la Tierra era un planeta como todos los demás. Pensaron que los otros planetas eran cuerpos celestes que giraban alrededor de la Tierra, y los nombraron en consecuencia. Sin embargo, no hay evidencia concreta para esta teoría.

¿Cómo se formaron los cráteres siberianos?



Estos cráteres son uno de los misterios geológicos más extraños y más extraños de la Tierra. Ubicados en las penínsulas de Yamal y Gydan de Rusia, estos enormes agujeros se descubrieron en 2014 y no han dejado de cambiar desde entonces. Se han vuelto más grandes y más numerosos, y no faltan teorías sobre por qué aparecieron. ¡La gente ha sugerido todo, desde un impacto de meteoros hasta los proverbiales "extraterrestres"! La explicación más común sugiere que provienen de burbujas de gas metano que explotan a medida que el permafrost siberiano se calienta, pero puede que este no sea el caso.

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