Los estigmas de Jesucristo marcados en la frente de un bebé

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Un bebé nació con extrañas marcas (o estigmas) semejantes a las lesiones sufridas por Cristo durante el día de su crucifixión y está atrayendo mucha atención por parte de los cristianos en las Filipinas. Miles de fieles ya se han congregado alrededor del Hospital General de la ciudad de Quezon, con la esperanza de ver al niño bendecido.

Jejomar Castillo nació en la mañana del 15 de marzo, teniendo extrañas heridas en la frente, manos y pies. Estas sorprendentes llagas son casi idénticas a las famosas heridas sufridas por Jesús, incluyendo las heridas en la cabeza asociadas con la corona de espinas y las heridas causadas por la propia crucifixión.
De acuerdo con uno de los expertos microbiológicos más experimentados del país, Merlyn Cruz, el niño sufre un síndrome muy raro que causa la púrpura localizada, que se caracteriza por cambios de color rojo o púrpura en la piel.
Los rumores de un niño bendecido se propagan rápidamente por todo el hospital, luego a través de la ciudad, y finalmente en internet.
El público ha estado allí durante dos días, rezando y cantando temas religiosos como Bienvenida al Salvador. Muchas de las personas en el sitio parecen asociar el nacimiento de este niño enigmático con el retorno bíblico de Jesucristo.
El caso más famoso de los estigmas en la historia moderna, es sin duda la de Pío de Pietrelcina, comúnmente conocido como el Padre Pío, que era un fraile, sacerdote y místico de la Orden Católica Romana de los Frailes Menores Capuchinos. Se hizo famoso por soportar los estigmas la mayor parte de su vida y ahora es venerado como un santo en la Iglesia Católica.
Decenas de otros casos de estigmas se han registrado durante siglos, pero ninguno de ellos en relación con un niño recién nacido. Esta condición única ya ha atraído mucha atención a Jejomar y a su familia. Los entusiastas cristianos que se han reunido alrededor del hospital ya hasta lo llaman un Santo. El bebito Jejomar Castillo, por lo tanto, realmente ya parece estar condenado a tener una vida muy diferente a la de la mayoría de los niños filipinos...


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